Se mantiene prohibición de extracción y comercialización de moluscos bivalvos (pianguas, mejillones, ostras entre otros) por efectos nocivos de marea roja

  •  La medida sanitaria preventiva se ordenó el pasado 16 de diciembre del 2021, para las costas del Pacífico Central y Pacífico Norte, de los puntos comprendidos entre la frontera con Nicaragua y Dominicalito, incluyendo las costas e islas localizadas en el Golfo de Nicoya, con excepción de Isla Chira y Costa de Pájaros.

  • El consumo de moluscos bivalvos que contengan toxinas representa un riesgo de intoxicación para las personas que los ingieran.

 


La Comisión Interinstitucional para Prevención y Control de la Marea Roja comunica que se mantiene vigente la medida sanitaria preventiva que se ordenó el 16 de diciembre de 2021, mediante la cual se establece  la prohibición de extracción y comercialización de moluscos bivalvos (pianguas, mejillones, ostras, entre otros), provenientes de las  costas del Pacífico Central y Pacífico Norte, de los puntos comprendidos entre la frontera con Nicaragua y Dominicalito, incluyendo las costas e islas localizadas en el Golfo de Nicoya, con excepción de Isla Chira y Costa de Pájaros.

 

La medida se debe a la presencia de toxinas marinas de tipo paralizante, detectadas en muestras de carne de moluscos bivalvos analizadas recientemente, esto debido a los efectos del evento conocido como “marea roja”.

 

El consumo de moluscos bivalvos que contengan toxinas marinas, representa un riesgo de intoxicación para las personas que los ingieran, provocando efectos que van desde trastornos digestivos o neurológicos hasta la muerte.

 

Por esa razón, la Comisión hace un llamado a los molusqueros y pescadores para que no extraigan ni comercialicen este tipo de productos, de las áreas donde aplica la restricción, en tanto se mantenga la medida sanitaria, con excepción de la extracción de muestras para fines de análisis de laboratorio liderado por las instituciones públicas competentes.

 

También, alerta a los dueños de establecimientos que comercialicen moluscos, como sodas, restaurantes, hoteles, pescaderías, entre otros, y a la población en general, para que se aseguren que los moluscos que adquieren no provengan de las zonas afectadas por la medida sanitaria.

 

La medida sanitaria se extenderá hasta que los resultados de los análisis realizados por el Laboratorio Nacional de Servicios Veterinarios del SENASA (LANASEVE), confirmen que los productos son aptos para el consumo humano.

 

El Instituto Mixto de Ayuda Social, IMAS, por su parte, ha atendido durante los meses de enero y febrero a las familias molusqueras que respetan la restricción, otorgándoles un subsidio que permite atender las necesidades básicas de los hogares durante este período de afectación.

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