A partir de este año dos eventos mundiales ponen en el tapete el tema de sanidad vegetal

·         La Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF) establece el 2019 como año temático de Sanidad Vegetal y Creación de Capacidades

·         La ONU declara el 2020 como el Año Internacional de Sanidad Vegetal

11 de febrero 2019. Los cultivos alimentarios frente a las amenazas de las plagas adquieren relevancia en el mundo en 2019 y 2020, en el marco de dos eventos en el tema de la sanidad vegetal.  El primero de ellos se refiere al año temático de Sanidad Vegetal y Creación de Capacidades y forma parte de las actividades de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (CIPF).  El segundo,  obedece a la declaración de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para celebrar el 2020 como Año Internacional de Sanidad Vegetal.
 
“Desde el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), se aplauden estas iniciativas en respaldo a la importancia de la seguridad fitosanitaria en el mundo y en especial al esfuerzo de cada país en la protección de los vegetales contra los perjuicios causados por las plagas, evitando la introducción y difusión de plagas que amenazan la seguridad alimentaria”, afirmó Fernando Araya Alpízar, director del SFE.
 
Según la CIPF, en la actualidad, hasta el 40 por ciento de los cultivos alimentarios mundiales se pierden anualmente debido a las plagas de las plantas. En términos de valor económico, solo las enfermedades de las plantas cuestan a la economía mundial alrededor de US $ 220 mil millones al año y el control de los insectos invasores alrededor de US $ 70 mil millones.
 
“La sanidad vegetal está orientada a la prevención y el control de las plagas que afectan a las plantas y a los productos vegetales. Incluye la regulación de las importaciones y exportaciones, mediante medidas fitosanitarias encaminadas a prevenir y controlar las plagas que se propagan a nuevas zonas, en especial a través del comercio internacional y el turismo”, afirman los especialistas.
 
Las organizaciones vinculadas con la sanidad vegetal coinciden en que las plantas constituyen la base de toda la vida en la tierra, tanto por el aporte del oxígeno como por la contribución del 80% de los alimentos que se consumen. “La sanidad vegetal es la clave para la intensificación sostenible de la agricultura, para alimentar a la creciente población mundial”, asegura la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
 
El 2019 recalca la capacidad fitosanitaria de los países, entendiéndose “la capacidad de las personas, organizaciones y sistemas de un país para desempeñar funciones de manera eficaz y sostenible con el fin de proteger las plantas y productos vegetales de las plagas y facilitar el comercio, de conformidad con la CIPF", agrega la FAO.
 
Para este año la CIPF espera que se realicen actividades a nivel regional y nacional, de forma que se cumpla con los objetivos que enmarcan esta actividad y se refleje la importancia de implementar la Convención y sus normas, gestiones viables para la protección de la sanidad vegetal y el comercio; compromiso nacional para hacer sostenible la capacidad fitosanitaria; adaptar y evolucionar la capacidad fitosanitaria de acuerdo con las circunstancias cambiantes; políticas gubernamentales que incluyen los asuntos fitosanitarios; cooperación regional efectiva, entre otras cosas.
 
El SFE es la organización nacional de protección fitosanitaria (ONPF) y forma parte de la Organización Regional de Protección Fitosanitaria (ORPF). 
 
En el marco de la celebración del Año Internacional de Sanidad Vegetal (AISV), en el 2020, se espera que se aborden los problemas nuevos y emergentes relacionados con la sanidad vegetal; incluyendo los efectos del cambio climático, el aumento del comercio internacional, la creciente pérdida de diversidad biológica y nuevas vías de introducción de plagas.

 

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