Autoridades del SFE alzan la voz por recorte presupuestario

  • Recorte afectará servicios esenciales de impacto nacional e internacional para Costa Rica
  • Las acciones del SFE deben ser evaluadas por la particularidad que reviste para el país

Hoy el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), alzó la voz para hacer conciencia sobre la afectación que sufriría el país por el recorte presupuestario, dada la importancia de su labor en los servicios esenciales para mantener la sanidad vegetal del país, que repercute en el comercio nacional e internacional de productos agrícolas, la salud pública y el ambiente.

“La capacidad para reaccionar ante el ingreso de una nueva plaga cuarentenaria (que no está en el país) se debilita por la falta de recursos. El SFE realiza inspección, muestreo y diagnóstico de plagas en puntos de ingreso: terrestres, marítimos y aéreos. Las plagas exóticas pueden ingresar, establecerse y diseminarse, pudiendo ser devastador para el país; podemos citar el Foc R4T contra quien estamos en pie de lucha por la gran amenaza al banano, uno de los principales productos de exportación. Tenemos más de 50 plagas que nos ocupan actualmente, entre ellas podemos hablar del caracol gigante, una plaga de gran potencial reproductivo y destructivo, que actualmente está en un anillo de contención en Guanacaste”, enfatizó Nelson Morera Paniagua, director del SFE.

En los últimos 3 años el SFE ha realizado alrededor de 10 mil diagnósticos de plagas por año, lo que ha permitido interceptar un total de casi 500 plagas cuarentenarias de gran amenaza para el país y evitar su ingreso a territorio nacional. Prevenir el ingreso de una plaga cuarentenaria significa evitar que se cierre mercados a los productos nacionales, librarse de la ejecución de gran cantidad de recursos económicos para la contención y control de una plaga (que en muchas ocasiones no se puede erradicar), cuidar la salud de las personas y el ambiente, ya que dentro de las opciones para controlar una plaga cuarentenaria está el uso de plaguicidas. Finalmente, e igualmente importante, es que no se puede perder de vista las pérdidas económicas que deja una plaga a su paso, agregó Morera.

Otro de las actividades que realiza el SFE es el análisis de residuos de agroquímicos en productos vegetales de consumo, tanto de importación como a nivel nacional, para evitar que los productos excedan el nivel máximo de residuos (LMR). El 100% de los productos agrícolas importados cumplen con el LMR para ingresar al país. Con respecto a los productos de producción nacional la labor tiene muchos años en su historia capacitando y dando seguimiento para que los productores nacionales puedan bajar los LMR. Es una labor permanente que no se puede descuidar. Las cifras de los periodos de estudio revelan que del 91% al 80% de vegetales que llegan a la mesa de los costarricenses están cumpliendo el LMR; es imposible baja la guardia, debemos alcanzar mayores índices de cumplimiento y para ello se necesita mucho trabajo. En los últimos años hemos aumentado la capacidad de análisis en nuestros laboratorios, los cuales ahora estarían en riesgo de poder cumplir con su labor, dado el recorte presupuestario que perjudicaría la calibración, mantenimiento y acreditación oficial de los laboratorios.

Nuestra labor es básica para poder exportar los productos agrícolas costarricenses, pues debemos asegurar a los socios comerciales que los productos agrícolas van libres de plagas según las regulaciones fitosanitarias de cada país. El recorte presupuestario, es un golpe muy fuerte al servicio de inspección y control a plantas empacadoras, con una grave repercusión en las exportaciones agrícolas.

El funcionario afirmó que no es una queja sino más bien un llamado a los diputados de la Comisión de Hacendarios para que procedan a revisar las particularidades de esta institución, cuyas funciones son fundamentales para el país en materia agroalimentaria. “Tan solo el año pasado estábamos celebrando el Año Internacional de la Sanidad Vegetal. La organización de Naciones Unidas proclamó el 2020 como el año internacional de la Sanidad Vegetal, con el objetivo de aumentar la conciencia a nivel mundial sobre la sanidad vegetal y su rol en el aumento de la seguridad alimentaria”, subrayó Morera Paniagua.


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